La inclusión de objetivos claros de recaudación de fondos dentro de la planificación anual es una práctica transformadora que impulsa la sostenibilidad y el impacto social de cualquier organización sin fines de lucro.
Contar con un plan de recaudación de fondos escrito proporciona una hoja de ruta que ayuda a evitar funcionar en modo reactivo y a anticipar necesidades futuras.
Más allá de gestionar crisis, una planificación anual sólida permite distribuir esfuerzos a lo largo del año y mantener la confianza de donantes, colaboradores y beneficiarios.
Incorporar objetivos de donación requiere un análisis profundo de la misión, visión y recursos disponibles. Esta integración beneficia la organización a corto, mediano y largo plazo.
Para lograrlo, sigue estos pasos:
Para maximizar ingresos y atraer nuevos perfiles de donantes, es fundamental priorizar formatos innovadores y fiscalmente atractivos.
La formalización y profesionalización de los procesos de captación fortalecen las alianzas y mejoran los resultados.
El contexto financiero actual presenta oportunidades únicas para la recaudación de fondos:
• El S&P 500 acumula retornos de dos dígitos en siete de los últimos diez años, un momento favorable para donaciones de acciones.
• Las colaboraciones con fondos asesorados por donantes y las donaciones empresariales están en auge, diversificando los canales de captación.
Lograr un equilibrio entre ambición y factibilidad es esencial para mantener la motivación y la credibilidad.
Considera estos aspectos:
Incluir metas de donación en tu planificación anual no sólo profesionaliza la gestión, sino que atrae más y mejores donantes, garantiza la diversificación de ingresos y consolida la sostenibilidad de la misión.
La clave reside en planificar con detalle, formalizar acuerdos, comunicar expectativas y explorar vías innovadoras de donación. Al hacerlo, tu organización estará mejor preparada para enfrentar retos, aprovechar oportunidades y generar un impacto social duradero.
Referencias